Soy una persona mañanera a la que le gusta mucho desayunar, y cuando lo hago suelo hacerlo por el lado dulce. Ya sean tortitas con sirope de arce, cereales con arándanos o un batido de fresas, me encantan las mañanas afrutadas y llenas de sabor. Sin embargo, a veces me gusta cambiarla por algo salado, como una frittata de verduras, muffins de salchicha o estas crujientes tortitas de patata con cebolleta.
Estas sabrosas tortitas son muy sencillas y rápidas, y están tan deliciosas con una cucharada de crema agria como con un plato de huevos y beicon. Para servir a cuatro personas, basta con pelar y rallar unas cuatro patatas y mezclarlas con una clara de huevo, cebolletas, sal y pimienta. Colócalas en una sartén caliente con un poco de aceite y presiona firmemente para que se doren y queden crujientes. Una vez cocidas, puedes servirlas tal cual o cortarlas en gajos para comerlas fácilmente. Estos pequeños hot cakes están riquísimos con nata agria o, como saben parecido a las patatas fritas, con ketchup.
Disfruta del resto de tus desayunos rápidos matutinos de esta semana, pero tómate el tiempo de probar estos alguna mañana lenta de fin de semana. Tú y quienquiera que tenga la suerte de comérselos contigo, ¡se alegrarán mucho de que los hayas hecho!