No sabía lo fácil que es hacerla en casa. En 10 minutos tienes salsa fresca de restaurante en casa.
Mientras escribía este post, me he dado cuenta de que no sé deletrear restaurante. Por suerte tengo el corrector automático para ayudarme. Definitivamente es otra palabra que nunca puedo deletrear bien. Pero me sentí mejor porque le pedí a mi marido que deletreara restaurante y tampoco pudo. Así que me alegro de no ser la única 🙂 .
En fin, basta de hablar de que no sé deletrear. Hablemos de la salsa del restaurante. Es una de mis partes favoritas de la comida. Me encanta la salsa de Chili. No sabía lo fácil que es hacerla en casa. Te tomas unos 10 minutos de tu día y tienes salsa fresca de restaurante en casa. Todos los deliciosos sabores se mezclaron en un abrir y cerrar de ojos y ¡tenía un lote enorme! ¿Por qué no he hecho esto antes? Estaba tan deliciosa que no nos cansábamos de comerla.
Incluido mi hijo de seis años. Él era mi asistente personal sosteniendo el chip en esta foto. Le dio ese mordisquito en la esquina. Era demasiado mono para no dejarlo 🙂 .
Ingredientes
- 1/4 cucharadita de comino molido
- 1 diente de ajo (picado)
- 1/2 taza de cilantro
- 1/4 taza de cebolla picada
- Zumo de una lima
- 2 latas de Rotel (10 onzas de Rotel)
- 1 lata de tomates enteros con zumo (28 onzas)
- 1/4 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de azúcar
- 1 jalapeño entero (en rodajas)
Instrucciones
- *Esto hace un lote grande. Llenó toda mi licuadora. Si quieres menos, la mitad de la receta.
- En una licuadora o procesador de alimentos combine los tomates enteros, el rotel, la cebolla, el ajo, el jalapeño, el azúcar, la sal, el comino, el cilantro y la lima. Pulse o mezcle hasta obtener la consistencia deseada.
- Refrigera durante una hora antes de servir y acompaña con totopos.