Durante los próximos días, nos van a instalar suelo nuevo en toda la primera planta de nuestra casa. La vida es cualquier cosa menos bonita, con volantes y magdalenas en este momento. Pero, en honor del Día de San Patricio, y porque a quién no le gusta el chocolate y la cerveza cuando la vida se pone patas arriba, os presento las magdalenas. Ricas y chocolatosas magdalenas que se derriten en la boca con un toque de cerveza negra y un remolino de glaseado de crema de queso al whisky.
Cariño.
Nunca se me ocurrió que la cerveza y el licor en un producto horneado sería una combinación deliciosa, pero chicos. Es de otro mundo. Los sabores son sutiles, pero añaden un toque agradable e inesperado a la deliciosa decadencia del rico chocolate y el esponjoso glaseado. Y antes de que te des cuenta, habrás engullido uno tras otro como un pequeño duende codicioso… ¡siempre me persiguen magdalenas de la suerte!
Prepara estos cupcakes fáciles, deliciosos y festivos para tu propia fiesta del Día de San Patricio o simplemente para probar algo nuevo. Son fabulosamente divertidos y fáciles, y su sabor no se parece a nada que hayas probado antes. Por no hablar de que son aún más divertidos de comer, ¡vestidos con su mejor traje de la suerte de los irlandeses!