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Gyros de pollo en slow cooker con salsa tzatziki

Como tu comida griega favorita, ¡pero 10 veces más fresca y sabrosa! Estos gyros de pollo al limón y ajo con salsa tzatziki de pepino son una comida sana, deliciosa y fácil.

Durante todo mi embarazo, y ahora casi un año después, he sentido un gusto insaciable por la cocina griega. Nunca me había gustado tanto la combinación de verduras frescas, limón ácido, aceitunas saladas y carnes cocinadas a fuego lento. Como la mayor parte de la cocina mediterránea, la griega se basa en pocos ingredientes de calidad y condimentos sencillos, como un chorrito de cítricos, una pizca de orégano y un puñado de ajo.

Cada vez que mi marido y yo comemos comida griega en nuestro restaurante local, él pide gyros de cordero con hummus, y yo una ensalada con pollo, tomates, pepino, tzatziki y pitas calientes. Así que, ¿qué nos haría más felices que una deliciosa combinación de nuestros dos platos favoritos… hecha fácilmente en casa?

Las pechugas de pollo de estos gyros se cocinan a fuego lento en una mezcla ácida y suavizante de zumo de limón, ajo, aceite de oliva y vinagre de vino tinto. Así que, para que la limpieza fuera rápida y sencilla, utilicé uno de mis utensilios de cocina imprescindibles, el Reynolds Slow Cooker Liners . Lo único que me impide utilizar mi olla de cocción lenta a diario es lavar el interior gigante. Sin embargo, estas bolsas resistentes al calor y a prueba de fugas hacen que la limpieza sea tan fácil como coger y tirar. Simplemente envuelva la olla de su olla de cocción lenta en un forro, cocine a fuego lento su receta favorita de olla de cocción lenta, y deseche el forro. Es lo suficientemente resistente como para aguantar los ingredientes más sustanciosos y no ensucia nada. No hay que remojar, fregar ni hacer nada más que disfrutar de la comida. Estas bolsas nos hacen volver a amar nuestra olla de cocción lenta.


El tzatziki tiene que ser la mejor parte de esta comida, ¡de verdad! Es nuestra salsa de verano favorita: la ponemos en todo, desde kebabs hasta hamburguesas, ensaladas y sándwiches. Y aunque su nombre suene complicado, no lo es en absoluto. Todo lo que necesitas es yogur griego, ajo, pepino, vinagre de vino tinto y un limón para esta salsa que cambia la vida. Te encantará.

Una vez cocido el pollo, simplemente lo corto en rodajas y lo vuelvo a poner en la olla mientras preparo las pitas y los ingredientes. Para calentar las pitas, se pueden envolver 1-2 a la vez en toallas de papel húmedas y calentar en el microondas, o ponerlas en la parrilla durante un par de minutos. De cualquier manera, ¡un poco de pan tostado en tu pita las hace muy sabrosas! Y no hay nada mejor que un pan de pita caliente relleno de pollo jugoso y verduras frescas y crujientes.

Así que, ¡a por ellos! Me gusta poner capas de pollo, tzatziki y montones de verduras crujientes como tomates, pepino, cebolla roja y lechuga. Sírvelo con unos gajos de limón y disfruta de este plato griego sano, abundante y fresco.