Hunda el tenedor en esta ensalada veraniega con melocotones frescos, fresas, pepinos y queso de cabra… ¡crujiente, salada y dulce!
¿No es la ensalada más alegre que hayas visto?
He tenido un serio Últimamente me encanta el queso de cabra fresco, y lo he desmenuzado sobre todo tipo de platos, desde pasta hasta carnes a la parrilla, pasando por crostini y, ahora, ensalada. En el mundo de los amantes del queso, ¡qué me estaba perdiendo! Mi marido, sin embargo, es… escéptico, pero se está convenciendo.
Afrontémoslo, el hombre comerá cualquier cosa si la envuelvo en salami.
Combinado con melocotones tiernos y dulces, pepinos crujientes y fresas jugosas, el queso de cabra es lo que más me gusta del mundo desde que las amas de casa de Nueva Jersey y todo su drama y cadenas de oro volvieron a mi vida.
Por favor. ¡Míralo tú también!
Rociada con una reducción balsámica superfácil, dulce y ácida, esta magnífica ensalada verde es una comida estupenda para saciarse de vitamina C y hierro. Sustituye las frutas por las que más te gusten si éstas no son lo tuyo. Unas frambuesas en lugar de fresas también estarían muy ricas. Los cubos de sandía fresca pueden apartar los melocotones para una elección aún más nutritiva.
¿Lo ves? Si tienes melocotones y fresas por ahí, no hace falta que los conviertas siempre en una tarta de mantequilla o de azúcar.
Pruebe esta deliciosa ensalada de verano para el almuerzo o como guarnición de pollo, cerdo o pescado a la parrilla. Es lo suficientemente fácil para los días laborables, pero lo suficientemente bonita para cenas relajadas durante los meses más cálidos. Creo que sería aún mejor con una pizca de albahaca fresca.
Sírvete una copa de vino rosado o blanco y acompaña esta ensalada con una rebanada de pan de ajo para una cena completa. Puedes sustituir el queso de cabra por cualquier otro queso que te guste, pero ya me conoces: ¡te recomiendo que elijas el de cabra!