Jugosa y tierna carne de cerdo a la parrilla con una salsa salada y dulce de ajo y jengibre. Cambia los sabores habituales de la semana con esta deliciosa comida familiar. Sírvelo con fideos de cacahuete o una ensalada de maíz fresco.
Es época de encender la parrilla. Nos encantan las recetas como ésta, que mantienen el calor fuera de la cocina y el sabor en nuestras comidas. Este fácil cerdo hawaiano ha sido un excitante giro de sabor y una comida barata que toda la familia disfruta. La combinación de sabor pegajoso, salado y dulce con el cerdo a la parrilla hace que se te haga la boca agua.
Servido con un bol de Fideos de soja y cacahuete y una cucharada de Caviar de Texas es la perfección del verano en un plato. Nos encanta servirlo tanto entre semana como en cenas con amigos hambrientos. 
La receta es sencilla, así que ¡manos a la obra!
Empieza con un adobo (que luego usarás para hacer una salsa). Añade el cerdo a la marinada y déjalo reposar durante al menos 20 minutos, o hasta 1 día. Yo opté por los 20 minutos esta vez, ¡y aun así me quedó una chuleta muy jugosa y tierna! Recuerde que no debe desechar la marinada cuando vaya a cocinar las chuletas.
En una parrilla bien caliente, añada la carne de cerdo y los anillos de piña y cocínelos por ambos lados hasta que estén bien dorados. Mientras tanto, la marinada sobrante burbujea en una cacerola, espesándose en la salsa pegajosa más deliciosa para rociar el cerdo cocido.
Espolvorea un poco de cebolla de verdeo por encima y ¡listo para servir!
