Esta cremosa, ácida y colorida bruschetta con tomates balsámicos y aguacate es el aperitivo perfecto para el verano.
Cuando vivíamos en California, mi marido y yo disfrutábamos en abundancia de deliciosos platos con aguacate. Como guarnición de marisco fresco o en un guacamole que hacía la boca agua, el aguacate era en todas partes . No podíamos apartarnos de la preciosa fruta verde pálido… Pero, ¡no es que lo intentáramos!
Sigue siendo una de las frutas favoritas en mi casa y, especialmente en verano, el aguacate está presente en todas nuestras ensaladas caseras, sándwiches y aperitivos que preparamos para las fiestas. Pero, ¿la única fruta que nos gusta más que el aguacate? El tomate.
Mezclados con una ácida mezcla de vinagre balsámico, aceite de oliva y ajo, los tomates tenían un sabor dulce como el caramelo sobre un lecho de cremoso aguacate triturado.
Un crujiente pan francés en rebanadas sirve de base perfecta para estas deliciosas bruschetta veraniegas. Son tan fáciles de hacer como coloridas y saladas. Sírvelas como guarnición de carnes y pescados a la parrilla, o como un fresco aperitivo para fiestas que los invitados engullirán.
Cada bocado es mejor que el anterior y sé que después de uno, estarás de acuerdo. ¡Estas bruschetas de aguacate son irresistiblemente buenas!
