Galletas caseras de mantequilla de cacahuete con bolas de helado de vainilla y plátanos frescos mezclados. Perfectas para fiestas o como tentempié después del colegio, y muy fáciles de hacer. ¡Te encantarán estas galletas de mantequilla de cacahuete y plátano!
¿Qué tiene la combinación de mantequilla de cacahuete y plátano que es tan deliciosa? Ya sea en un sándwich, en bocaditos o en una tarta, la combinación clásica de mantequilla de cacahuete cremosa y rodajas de plátano dulce no puede fallar. Ahora te traigo otra idea irresistible con este feliz maridaje de sabores, ¡y ésta incluye helado!
No puedo creer que no haya compartido mi receta favorita de galletas de mantequilla de cacahuete con vosotros hasta ahora. Así que pensé que no sólo compartiría esa galleta que se derrite en la boca, sino también una forma divertida de realzar su sabor. Mi helado ligero favorito de todos los tiempos con trocitos de plátano fresco y colocado entre dos galletas de mantequilla de cacahuete.
Perfectos para picar después del colegio, darse un capricho después de cenar, picar en fiestas o en cualquier ocasión que reúna a los amantes de la mantequilla de cacahuete.
Esta receta no sólo mejora una galleta de mantequilla de cacahuete, ¡sino que convierte un helado ya de por sí estupendo en una delicia irresistible!
Rara vez me encontrarás paseando por el supermercado sin un cartón de Helado Dreyer’s Slow Churned Classic Vainilla light en mi cesta. Es, sin lugar a dudas, una marca sin la que no puedo vivir, y siempre elijo el sabor vainilla, con su textura rica y cremosa y su cálida fragancia. Sabe a pura decadencia por sí solo (con la mitad de grasa y un tercio de calorías que el helado normal), pero puede mejorarse aún más con unos sencillos complementos. Hoy mismo he disfrutado de un bol con un chorrito de salsa de chocolate y nueces de Texas tostadas: ¡el paraíso!
Combinar el helado de vainilla con plátanos troceados es sin duda mi último giro favorito al sabor clásico. Simplemente deja que el helado se ablande un poco, luego pica un par de plátanos e incorpóralos al helado con una espátula de goma. También puede utilizar un procesador de alimentos grande para esto. Una vez que el plátano y el helado estén bien mezclados, saca el helado y colócalo entre dos galletas de mantequilla de cacahuete. Si no las vas a servir enseguida, mételas en el congelador hasta que estén listas.
Tanto a los niños como a los adultos les encantarán estos sabrosos dulces de plátano y mantequilla de cacahuete en cualquier época del año. Espero que disfrutes de esta receta y que me cuentes qué tal te ha salido si la pruebas.