He estado en una pequeña rutina de hornear últimamente, tal vez ha sido el tiempo deprimente, pero la idea de hornear algo y cargar con todo mi equipo de fotografía parecía demasiado desalentador. A veces sólo quiero hacer algo y disfrutarlo sin sentirme presionada para que quede bonito; pero luego me siento culpable y todo el tiempo que estoy «disfrutándolo» pienso «¡debería haber publicado esto en el blog!». El otro día hice un pastel de caja, ni siquiera le añadí glaseado y me lo comí directamente del molde para no sentir esa culpa. Lo que resultó en que yo sintiera otro tipo de culpa por comer demasiado pastel directo del molde. ¡Ja!
Así que para salir de esta depresión, me propuse un proyecto. Busqué en mi blog una receta antigua con las fotos más horrendas que pude encontrar, y me propuse rehacer la receta y actualizar las fotos. ¿Quieres ver las fotos antiguas de esta receta de Lemon Bar?
Oh. Cielos. Cielos. En mi defensa, las barras a veces son difíciles de disparar. Está claro que tengo algunos problemas de apilamiento. Esto también fue antes de que aprendiera que la luz natural es la reina (es decir, di no al flash) y cómo disparar en manual. Ahora ni te molestes en buscar esa receta de 2012, la he desterrado de las interwebs. No puedo negar la evidente mejora de las fotos de hoy, pero no puedo esperar a ver dónde estoy dentro de dos años. Hay tanto que aprender.
Ni siquiera soy una gran fan de los postres con limón. Me gusta el limón sutil, como mi Lemon Pound Cake, pero en su mayor parte soy una chica de chocolate. Dicho esto, estas Lemon Bars podrían ser mi postre favorito.
La corteza es perfectamente hojaldrada y mantecosa. El relleno es dulce y cremoso con ese sutil y suave sabor a limón que me encanta, generosamente espolvoreado con azúcar glas para rematar. Tengo que sacarlos de mi casa cuanto antes o me comeré todo el molde. Algo así como ese pastel sin glaseado que hice la semana pasada. Ejem.

Ingredientes
- 4 huevos (ligeramente batidos)
- 6 cucharadas de zumo de limón
- 2 tazas de harina
- 1/2 taza de azúcar en polvo
- 4 cucharadas de harina
- 2 tazas de azúcar
- 1 taza de mantequilla (ablandada)
- 1 cucharadita de levadura en polvo
Instrucciones
- Precaliente el horno a 350 grados.
- Mezclar con un tenedor la harina (menos las 4 cucharadas), el azúcar en polvo y la mantequilla.
- Una vez que haya formado migas suaves, presione la mezcla en el fondo de un molde 13x9 sin engrasar.
- Hornear durante 15 minutos.
- Mezcle todos los ingredientes restantes y viértalos sobre la corteza horneada.
- Dejar hornear otros 25 minutos, o hasta que la parte superior esté ligeramente dorada.
- Dejar enfriar y espolvorear con azúcar glas.